Hay muchas situaciones en la vida en la que hacemos lo que nos gusta, son cosas buenas, muchas veces, es lo natural. Otras veces hacemos cosas por complacer a alguien, por ayudar a alguien y tambien hacemos cosas que nos prohiben, más aun si los que prohiben son nuestros padres.
Recuerdo haber leido el cuento de los hermanos Grimm Caperucita Roja cuentos que datan de hace dos siglos y que nos narra el peligro a que se exponen las niñas al hacer caso a desconocidos.
En la actualidad ya no solo es hacer caso a desconocidos, sino hasta los mismos conocidos pretenden hacer daño a niños por el simple hecho de ser considerados los seres más fragiles de la naturaleza humana.
Por eso se tiene que evitar las malas compañias ese es el punto principal de este comentario. Muchas veces se piensa que los padres son anticuados, que no han vivido, que no conocen lo que ocurre en la mente de un joven. muchos olvidan que sus padres también han sido jovene y han experimentado lo mismo que ellos. Tiempo atrás más bien se contaba con la presencia de la madre en casa. Los tiempos han cambiado y la madre trabaja para ayudar a mantener el hogar , para poder darnos algunos gustos algunas veces y otros para asumir el rol que les corresponde a algun hombre. El hecho es que los niños se quedan a cargo de una empleada que los cuida pero
¿le da cariño? es decir, puede reemplazar a un padre que ha estudiado tanto para otros y abandona a su hijo en manos de una extraña que muchas veces no posee una instrucción completa.
Lo cierto es que los ñiños necesitan amor y se acercan al que prentende brindarles ese cariño que no encuentra en casa. Estamos conduciendo los padres mismos a su propio fin. Debemos meditar al respecto.
Más no debemos olvidar que muchas veces existe una confianza inmensurable con amigos y sobre todo las mujeres olvidan que deben tener cuidado con lo que les invitan. Sobre todo considerar que puede ser el último trago de su vida.
Recuerdo haber leido el cuento de los hermanos Grimm Caperucita Roja cuentos que datan de hace dos siglos y que nos narra el peligro a que se exponen las niñas al hacer caso a desconocidos.
En la actualidad ya no solo es hacer caso a desconocidos, sino hasta los mismos conocidos pretenden hacer daño a niños por el simple hecho de ser considerados los seres más fragiles de la naturaleza humana.
Por eso se tiene que evitar las malas compañias ese es el punto principal de este comentario. Muchas veces se piensa que los padres son anticuados, que no han vivido, que no conocen lo que ocurre en la mente de un joven. muchos olvidan que sus padres también han sido jovene y han experimentado lo mismo que ellos. Tiempo atrás más bien se contaba con la presencia de la madre en casa. Los tiempos han cambiado y la madre trabaja para ayudar a mantener el hogar , para poder darnos algunos gustos algunas veces y otros para asumir el rol que les corresponde a algun hombre. El hecho es que los niños se quedan a cargo de una empleada que los cuida pero
¿le da cariño? es decir, puede reemplazar a un padre que ha estudiado tanto para otros y abandona a su hijo en manos de una extraña que muchas veces no posee una instrucción completa.
Lo cierto es que los ñiños necesitan amor y se acercan al que prentende brindarles ese cariño que no encuentra en casa. Estamos conduciendo los padres mismos a su propio fin. Debemos meditar al respecto.
Más no debemos olvidar que muchas veces existe una confianza inmensurable con amigos y sobre todo las mujeres olvidan que deben tener cuidado con lo que les invitan. Sobre todo considerar que puede ser el último trago de su vida.
